Preparativos para una nueva
campaña |
|
Luego de la emancipación chilena San
Martín se trasladó a Buenos Aires para obtener del gobierno un empréstito que
permitiera costear los gastos de El Gobierno de Chile determinó que
San Martín sería el comandante en jefe de la expedición, que navegaría bajo
bandera chilena. Finalmente San Martín fue designado general en jefe del
Ejército de Chile, y general del mismo, siéndole conferido ad honorem el
grado de Capitán General del ejército de Chile dos días después de ello.
Cuando se disponía a reanudar la campaña al Perú recibió la orden del
Directorio de marchar hacia el Litoral Argentino con su ejército para
combatir a los federales de Santa Fe y Entre Ríos. San Martín se negó de
plano, y ante la insistencia respondió con el silencio. En febrero de 1820,
la victoria del Partido Federal provocó la caída del Directorio de las
Provincias Unidas, quedando el país sin gobierno central. Esta situación dejó
sin respaldo legal su autoridad, por lo que renunció frente a los oficiales
argentinos; pero estos, dirigidos por el coronel Enrique Martínez, rechazaron
su renuncia. Finalmente, el 20 de agosto de 1820 partía San Martín junto a la expedición desde Valparaíso hacia el Perú. La expedición estaba constituida por alrededor de 4.500 hombres, pertenecientes al Ejército libertador de los Andes y al Ejército de Chile, de los cuales 1.600 eran marinos. Se embarcaron en ocho navíos de guerra y dieciséis transportes. No se puede especificar a ciencia cierta cuantos soldados argentinos y cuantos chilenos conformaban la expedición y que número prevaleció pero la mayor parte de los oficiales eran argentinos y los jefes navales de orígenes varios, siendo de destacar los británicos entre quienes se encontraba Cochrane, franceses como Hipólito Bouchard y chilenos como Manuel Blanco Encalada. |
|